Parroquia Asunción de Nuestra
Señora de Torrent
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Campamento Juveniles 2001
Jueves, 12 de julio de 2001
Parábola del Sembrador
Aquel día, salió Jesús de casa y se sentó a orillas del mar. Y se reunió tanta gente junto a él, que hubo de subir a sentarse en una barca, y toda la gente quedaba en la ribera. Y les habló muchas cosas en parábolas. Decía: «Una vez salió un sembrador a sembrar. Y al sembrar, unas semillas cayeron a lo largo del camino; vinieron las aves y se las comieron. Otras cayeron en pedregal, donde no tenían mucha tierra, y brotaron enseguida por no tener hondura de tierra; pero en cuanto salió el sol se agostaron y, por no tener raíz, se secaron. Otras cayeron entre abrojos; crecieron los abrojos y las ahogaron. Otras cayeron en tierra buena y dieron fruto, una ciento, otra sesenta, otra treinta. El que tenga oídos, que oiga.» . Y acercándose los discípulos le dijeron: «¿Por qué les hablas en parábolas?» El les respondió: «Es que a vosotros se os ha dado el conocer los misterios del Reino de los Cielos, pero a ellos no. Porque a quien tiene se le dará y le sobrará; pero a quien no tiene, aun lo que tiene se le quitará.
Explicación de la parábola del Sembrador:
Sucede a todo el que oye la Palabra del Reino y no la comprende, que viene el Maligno y arrebata lo sembrado en su corazón: éste es el que fue sembrado a lo largo del camino. El que fue sembrado en pedregal, es el que oye la Palabra, y al punto la recibe con alegría; pero no tiene raíz en sí mismo, sino que es inconstante y, cuando se presenta una tribulación o persecución por causa de la Palabra, sucumba enseguida. El que fue sembrado entre los abrojos, es el que oye la Palabra, pero los preocupaciones del mundo y la seducción de las riquezas ahogan la Palabra, y queda sin fruto. Pero el que fue sembrado en tierra buena, es el que oye la Palabra y la comprende: éste sí que da fruto y produce, uno ciento, otro sesenta, otro treinta.»
OBJETIVOS:
- Despertar el interés hacia la Palabra de Dios.
- Fomentar una actitud receptiva.
8.00 h Diana de Educadores.
8.15 h Diana General.
9.00 h Oración.
Lectura de la Parábola
ORACIÓN.
¡Gracias Señor,
por este nuevo día en mi vida! un día que no habrá de volver Y cuyo significado dependerá de mí mismo y de mi actitud.
A! concederme este día. Señor, me das tiempo para conocerme mejor, para definir mis opciones, para gozar, sufrir y esperar.
Te pido. Señor, que estés a mi lado, que me ayudes a valorar el tiempo y a descubrir en mi los signos de tu gracia.
Dame tiempo. Señor, para reflexionar y orar, para escuchar y perdonar, para dar y recibir, para recordar y soñar.
Y sobre todo. Señor, dame tiempo para amar.
PADRENUESTRO.
9.20 h Desayuno.
10.00 h Arreglo tiendas y servicios.
11.00 h Almuerzo.
11.30 h ACTIVIDAD DE LA MAÑANA.
RALLY: ¿DE QUÉ HABLAMOS?
La actividad de esta mañana consiste en un rally, para empezar a variar un poco en el campamento. El objetivo es que descubran, al concluir el juego, el tema que se tratará durante todo el día: la parábola del sembrador.
Los educadores se repartirán en controles. En cada control se dará una pista. Para conseguir esta pista, deberán hacer una prueba, a gusto del educador. Una vez obtengan todas las pruebas, el grupo se reunirá en el comedor para descubrir el tema del día.
Las pistas que se darán son las siguientes:
- Semilla, Estiércol, Manzanas, Brotar, Rocoso, Agricultor, Dios, Oración, Reino.
Reuniendo las iniciales de las ocho pistas, se obtiene el nombre de la parábola a tratar.
12.45 h Duchas.
14.00 h Comida.
15.00 h Tiempo libre.
17.00 h Talleres.
18.30 h Merienda.
18.45 h REUNIÓN.
La reunión de esta tarde se dividirá en 2 partes.
La primera parte consiste en tratar de un modo más profundo la parábola. Para ello la leeremos, y entre todos se analizará el significado que tiene. El educador puede seguir un pequeño guión:
- ¿Quién es el sembrador?
- A quién representa cada una de las semillas que el sembrador va sembrando.
- Qué son los abrojos; qué representa el terreno rocoso...
Puede ayudar esta pequeña reflexión para el educador:
“ Sucede a todo el que oye la Palabra del Reino y no la comprende, que viene el Maligno y arrebata lo sembrado en su corazón: éste es el que fue sembrado a lo largo del camino. El que fue sembrado en pedregal, es el que oye la Palabra, y al punto la recibe con alegría; pero no tiene raíz en sí mismo, sino que es inconstante y, cuando se presenta una tribulación o persecución por causa de la Palabra, sucumba enseguida. El que fue sembrado entre los abrojos, el que oye la Palabra, pero las preocupaciones del mundo y la seducción de las riquezas la ahogan y queda sin fruto. Pero el que fue sembrado en tierra buena, es el que oye la Palabra y la comprende: éste sí que da fruto y produce, uno ciento, otro sesenta, otro treinta.”
Una vez los chavales descubren el significado ( y si no lo descubren el educador lo explica), reflexionan sobre su actitud durante la Eucaristía y durante las reuniones, que son los momentos en que la Palabra de Dios se pone en sus manos; con qué tipo de semilla se identificarían y porqué; etc.
La segunda parte de la reunión consiste en realizar una “parábola de la parábola”. En definitiva, deberán actualizar la parábola con una historia cuyo tema principal sea algo que en sus vidas ocurre y con lo que pueden sentirse identificados: en el instituto o colegio, en la familia, con sus amigos. Mientras se realiza la historia el educador debe encaminarla siempre hacia el sentido de la parábola. Por ejemplo, si eligen el tema de los amigos:
Si un amigo te aconseja ¿porqué lo hace?, Si le haces caso, ¿qué puede ocurrir? Aunque le hagas caso ¿puede que haya algún momento en el que caigas por no tener suficiente fuerza de voluntad? Etc. Y todas estas pregunta relacionarlas con la Palabra de Dios: ¿qué ocurre si escuchamos
la Palabra de Dios? ¿Si no da suficiente fruto en nosotros, podemos volver a escucharla para que nos vuelva a guiar? ¿lo hacemos así? Etc.
El educador deberá estar pendiente de que la historia sea más o menos “seria”, es decir, que no se escriba en cachondeo ya que este será el signo de la oración de la noche.
20.00 h Ensayo Cantos.
20.15 h Celebración de la Palabra.
21.00 h Cena.
22.00 h ACTIVIDAD DE LA NOCHE.
Este juego es bastante conocido por todos, pero a pesar de ello, se explicará brevemente.
Cada grupo empezará el juego con una cantidad base de dinero. A partir de ahí, empezarán a pasar por distinos controles en los que podrán aumentar esa cantidad, o disminuirla. Tendrán que ir ahorrando para ir adquiriendo una serie de propiedades que en el control central ( HACIENDA) se ofertarán. Cada componente del grupo representará un determinado rol, con el que jugará toda la noche.
Los distintos controles en los que el chaval consigue aumentar su capital o dismuirlo son:
- Carta más alta: El monitor se jugará una cantidad de dinero con el chaval a la carta más alta.
- Cara o cruz: El monitor se jugará una cantidad de dinero con el chaval a cara o craz.
- Banco: El chaval debe dejar su dinero durante un tiempo en el banco para obtener una rentabilidad predeterminada.
- Prestamistas: Se prestará dinero a cambio de unas pruebas. Si no se devuelve el dinero...
- Hacienda: El control central, cada determinado período de tiempo, llamará a un determinado rol: cocinero, sacerdote, educador... El último en llegar pagará una multa. Y a parte de esto deberán realizar una prueba, por la que, en caso de no ser superada, tambi´`en se pagará una determinada cantidad.
- El 7 y medio: También se apostarán dinero en este juego de cartas.
- Los dados: Como en todos los anteriores.
Al final del juego se realizará una subasta con todo lo que queda por vender. Ganará el equipo que más propiedades haya conseguido.
23.45 h Oración.
LECTURA BREVE. (Mt. 13,18-23).
Dijo Jesús a sus discípulos:
"Vosotros oís lo que significa la parábola del sembrador: si uno escucha la palabra del reino sin entenderla, viene el maligno y roba lo sembrado en su corazón. Esto significa lo sembrado al borde del camino. Lo sembrado en terreno pedregoso significa el que la escucha y acepta enseguida con alegría, pero no tiene raices, es inconstante y, en cuanto viene una dificultad o persecución por la palabra, sucumbe. Lo sembrado entre zarzas significa el que escucha la palabra, pero los afanes de la vida y la seducción de las riquezas la ahogan y se queda estéril. Lo sembrado en la tierra buena significa el que escucha la palabra y la entiende; ese dará fruto y producirá ciento otro sesenta, otro treinta".
Signo
Padrenuestro
0.00 h Silencio y reunión de educadores.
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